Para cualquier institución cumplir más de 100 años es un hecho importante, cuanto más si se trata del colegio, lugar por donde todos pasamos y dejamos un pedacito de nuestra infancia.
¿Quién a pesar de la distancia y del paso del tiempo, a pesar de los trances y altibajos de la vida cotidiana, podría olvidarse de su colegio?
¿En qué mente no hay un lugarcito para el recuerdo de los gratos y dulces momentos vividos en esta casa que los recibió como alumnas, como docentes, como auxiliares y como padres?
No hay momento más grato que el reencuentro de las personas para recordar los hechos del pasado, analizar el presente y proyectar el futuro. Los que hoy tenemos la responsabilidad de llevar adelante la institución, tomamos con respeto la experiencia de nuestros antecesores y agradecemos porque heredamos una estructura que nos fortalece y nos muestra el modelo de Jesús Maestro.
Asumimos el compromiso de conservar sus ideales, entendiendo que no hay crecimiento ni progreso, sin Educación y Fe. Creemos que educar es pensar en el futuro con esperanza y estamos dispuestos, desde este querido lugar a trabajar cada día para lograrlo.
El colegio Santa Elena, fue, es y seguirá siendo el colegio que forma mujeres líderes a la luz del Evangelio.
Sintámonos partícipes de esta gran misión para que siga entregando a nuestras alumnas los valores morales que ellas necesitan para conformar una sociedad cada vez más justa, solidaria e inclusiva.